lunes, 11 de enero de 2010

Partidas

Hablamos de derrochar el dinero, cuando queremos dar a entender que se ha dado un gasto excesivo, un estipendio de los recursos monetarios, ¿se puede hablar también de derrochar el amor?, ¿en qué sentido? Por ejemplo decir "derroché amor" puede significar algo positivo en el sentido de dar mucho amor, pero no tanto significar que malgasté mi amor. 

Amores malgastados, amores perdidos, amores que van, que se van, que tal vez se van para no volver, un poco así me siento ahora, después de la partida de Maira, como que ahora si es un amor que se va, se va. 

Tantas veces he sentido eso con ella, tantas... ese ha sido el signo de nuestro amor: la partida, pero junto con la partida, la vuelta, la llegada, como si fuera una maldición, una dulce maldición, un caballo de Troya que recibo, me destruye, se va y después, como pulsión indomable, vuelve, siempre vuelve. 

Pero ahora es diferente, lo siento así o, peor, quisiera que fuera así, una liberación, un adiós, un que te vaya bien, un "cuídate", como me dijo hoy en el aeropuerto y yo sin poder decir palabra. 

También ha sido mi decisión, una consecuencia, un acto consecuente. Veo tantas parejas formarse, mantenerse, que a veces pienso que me falta un "tornillo cupídico". Tal vez es el precio que pago por llegar un poco tarde a estos juegos. Será. 

Por mientras, por mientras debo seguir, nuevamente rearmarme y seguir. 

"Caminante no hay camino, solo hay camino al andar".